Escuchando un excelente tema de Dream Theater, escribo estas líneas.
Originalmente te iba a escribir algo, directamente. Pero no sé. Tengo muchas cosas de que escribir y poca paciencia para hacerlo. Me di la lata de leer todos mis post hasta la fecha, y me encontré con cosas bien interesantes. Consejo: escribir en los momentos precisos en que ocurren las cosas es como tomar apuntes sobre la vida, y cuando vienen las pruebas difíciles es bueno leerlo para verse mejor preparado.
Sigo siendo tan inconsecuente como lo fui a principios del año pasado, cuando se me ocurrió empezar a escribir en mi blog. Sigo sin resolver mis temas familiares. Sigo flojeando en la U. Sigo sin sacar muchos proyectos adelantes, y como lo dije alguna vez, sin ordenar mi pieza ni arreglar el mundo.
Lo que más me molesta de mi vida es que nada sale completo. Son tantas palabras tan claras como cambio o mejor o superación, que mi cabeza no logra interpretarlas. Son ideales, así como la utopía de la vida, como lo que contemplas sin comprometerte. Como saber primeros auxilios y limitarse a ser espectador de una escena. No lo entiendo. Sigo siendo tan poco constante, ¿mi fuerza de voluntad no ha cambiado en nada?
Todo tiene una explicación. Y yo mismo la escribí..lo que es peor. Los cambios no son bruscos; son pequeñas vueltas violentas para llegar a estar en otro lugar, como correr las patitas de a poco para salir de un lugar. Algún día me convenceré de esto, y algún día lo pondré en práctica.
Voy a escribir de otra cosa que tengo en mente de hace tiempo. Pero después.
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